El buen tiempo ya ha llegado y con él las ganas de poder salir a la calle y poder pasar más tiempo al aire libre.
Es cierto que las condiciones han cambiado y ahora debemos llevar mascarilla para salir a la calle, pero eso no debe de ser un impedimento para poder disfrutar del aumento de las temperaturas mientras practicamos ejercicio y cuidamos nuestra salud.
Caminar es un deporte que no necesita de una suscripción a un gimnasio. Es gratis y puedes hacerlo en compañía o solo, únicamente tienes que destinar unos 20 o 30 minutos de tu día a practicar el ejercicio más fácil de hacer.
No necesitas mucho, con mover las piernas mientras disfrutas de la compañía o de la tranquilidad y la paz que te aporta hacerlo solo es suficiente.
Y es que, ¿sabías que caminar aporta muchos beneficios a nuestra salud?
No te sorprendas si a partir de ahora tu médico deja apartados los medicamentos y te receta 20 minutos de caminata diarios.
Te protege de las enfermedades
Practicar ejercicio físico estimula la formación de glóbulos rojos y glóbulos blancos, que son los que encargan de proteger a nuestro organismo.
Cuando practicas deporte estás fortaleciendo tus músculos y a la vez también tu sistema inmunitario. Con caminar 20 o 30 minutos al día reduces las probabilidades de contagiarte de enfermedades como la gripe o un simple resfriado. También disminuyen los efectos de estas patologías y sus síntomas son más leves.
Así que ya sabes, si quieres crear ayudar a tu sistema inmunitario a proteger tu organismo de futuras infecciones deberás de empezar a caminar.
Protege tus articulaciones
Además de protegerte de futuras enfermedades también protege las articulaciones. ¿Cómo? Caminar puede aliviar los dolores articulares, ya que refuerza las rodillas y la cadera.
Estas articulaciones son las más afectadas por la artrosis, una patología que afecta a los cartílagos articulares provocando dolor y si no se trata puede llegar a ocasionar incapacidad funcional.
A parte de aliviar los dolores, también refuerza los cuádriceps, lo que retrasa la evolución de la enfermedad y reduce el dolor.
Caminar es un ejercicio altamente recomendable para aquellas personas que tienen una edad avanzada o con mucho peso.
Las personas con estas características deberán caminar un promedio de 20-30 minutos al día, en cambio para los más jóvenes se recomienda que el tiempo que destinen sea más o menos de una hora y que lo compaginen con otros deportes de mayor intensidad, como montar en bicicleta.
Controla los “antojos” dulces
El estrés, la ansiedad o incluso el aburrimiento pueden provocar que se caiga en la tentación de los dulces y todos sabemos que, aunque son un auténtico manjar no son muy saludables y no ayudan a cuidar la salud.
Pero qué pasa si te digo que caminar ayuda a controlar esos antojos que ponen en riesgo nuestra salud.
Caminar 15 minutos al día puede llegar a frenar el consumo de alimentos azucarados y además te ayudará a lidiar el estrés y la ansiedad.
¿El motivo? El efecto ansiolítico que provoca ir a pasear en nuestro organismo.
Reduce la posibilidad de padecer obesidad
Al igual que caminar reduce las posibilidades de contraer una enfermedad también reduce las posibilidades de padecer sobrepeso.
La obesidad es una patología que en su gran mayoría de veces se padece por un factor genético, pero existen métodos que luchan con este condicionante.
Caminar una hora al día contrarresta los efectos de estos genes a la mitad.
Y es que los efectos del deporte son multifactoriales, es cierto que los genes determinan y favorecen la aparición de algunas enfermedades, pero con determinados hábitos saludables se puede rebajar la probabilidad de padecerlas.
Mejora tu salud mental
Salir a caminar, ya sea solo o en compañía, ayuda a despejar y aliviar la mente de las preocupaciones y el estrés al que está sometida diariamente.
Ir a pasear puede llegar a ayudarte a superar una depresión ya que al practicar deporte se producen endorfinas, que son las hormonas encargadas de generar felicidad. Esto nos ayuda a sentirnos mucho mejor.
Otro de los beneficios es que te ayuda a conservar la memoria porque previene la degeneración del hipocampo, la zona del cerebro relacionada con la memoria y el aprendizaje.
Además, caminar reduce hasta un 40% el riesgo de sufrir enfermedades neurológicas.
Ayuda a fortalecer el corazón
Caminar a paso ligero durante 20 o 30 minutos te ayudará mejorar tu sistema circulatorio ya que reduce la presión arterial.
La circulación sanguínea es mucho más fluida, lo que reduce el riesgo de sufrir un infarto en un 27%.