Seguir el ritmo de lxs más pequeñxs de la casa es casi imposible, y más aún después de una intensa y larga jornada laboral, ¿verdad? Podríamos comparar su energía con la de las pilas más duraderas de la historia. ¡No paran quietxs!
Y lo más difícil, coincidimos seguro, es cuando por la noche no están cansadxs y no quieren ir a dormir. ¿Cómo es posible si no han reposado ni un segundo en todo el día? La ciencia se preguntó lo mismo y hoy tenemos la respuesta de por qué son tan incansables.
Pero no solo te revelaremos este misterio, sino que te daremos 3 ideas para canalizar esa energía infinita de forma saludable y te contaremos qué puedes hacer para seguir su ritmo.
¿POR QUÉ LXS NIÑXS NO SE CANSAN NUNCA?
En un estudio publicado por Frontiers in Physiology se compararon los perfiles metabólicos de lxs niñxs con los de atletas de alta resistencia y veinteañerxs poco entrenadxs. En concreto, se analizó el modo en que sus cuerpos producen energía al realizar ejercicios de alto impacto y cómo es su recuperación muscular. Adivina a qué grupo se asemeja más la energía de tus pequeñxs…
Sí, has acertado, a la de lxs atletas. La velocidad en la que su ritmo cardíaco regresa a la normalidad es incluso más rápida que la de estxs. Además, hacen un mayor uso del metabolismo aeróbico (forma de producir energía con necesidad de oxígeno) que un joven poco entrenadx. Así que sí, es normal que después de jugar con ellxs te sientas casi como si hubieras corrido una maratón.
Ahora bien, si quieres que te den un poco de tregua, atentx a lo siguiente:
3 IDEAS SALUDABLES PARA ENTRETENER A TUS PEQUEÑXS INCANSABLES:
1. El deporte es un must.
El ejercicio físico es importante en cualquier edad, pero durante la infancia y la adolescencia, aparte de aportar grandes beneficios para la salud, ayuda a canalizar esa sobredosis de energía. Puedes apuntarles a un deporte de equipo con sus amigxs o bien practicar ejercicio físico en familia.
Eso sí, déjales que prueben distintos deportes. Esta experimentación es necesaria para promover el desarrollo de múltiples habilidades y dejarles decidir qué deporte les enamora más. Quien sabe, tal vez tu hijo sea el próximo Rafa Nadal.
2. Juegos con ritmo.
Pintar y colorear es fantástico para mejorar su imaginación y creatividad, pero si alternas esta actividad con juegos que les hagan mover el cuerpo, conseguirás dos cosas: se divertirán y descargarán energía. ¿Qué tal una guerra de almohadas o crear una yincana en el comedor?
Recuerda también que existen muchos videojuegos con opciones que fomentan el ejercicio físico o el baile. No obstante, el uso de pantallas siempre debe hacerse con moderación.
3. ¿Madalenas? Involúcrale en la cocina.
Si tu pequeñx todavía tiene energía después de toooodas las actividades que ha hecho durante el día, ¿por qué no preparar juntxs la cena? Puede ser muy divertido, lxs mantendrá entretenidoxs y pasaréis un buen rato juntxs.
Además, puedes aprovechar para contarle la importancia de una dieta saludable y adjudicar un día a la semana para dedicarlo a ello. ¡Seguro que le encanta!
PERO, ¿CÓMO SEGUIR SU RITMO?
La resistencia y la recuperación muscular de un adulto no es la misma que la de unx niñx pequeñx. Es por eso por lo que te contamos 3 trucos para seguir su ritmo:
· Si no puedes corriendo, ve en bici. Hazte con una buena bicicleta y planead salidas por la naturaleza. El deporte al aire libre es muy beneficioso para la salud (de ambos).
· Medita y relaja la mente. Muchas veces el cansancio está provocado por la saturación mental que te ha ocasionado el trabajo o problemas personales. Meditar y hacer yoga te ayudará a relajar la mente y recuperar energía.
· Entrena y sigue una dieta saludable. No hay mejor manera de aumentar tu energía que poniéndote en forma y comiendo bien. Pronto sentirás que ya no te cansas tanto persiguiéndoles por todas partes.