La vida sedentaria que la Covid-19 nos impuso hace ya más de un año provocó que nuestra salud se viera afectada. Muchos de los hábitos que cogimos durante el confinamiento, y que hoy en día aún tenemos, pueden ser perjudiciales para nuestra salud y eso debe cambiar.
Tuvimos que parar motores y abandonar nuestros hábitos, pero eso no significa que hoy en día no podamos recuperar una rutina de ejercicio físico.
Toma nota porque a continuación vamos a darte una serie de ejercicios que podrás hacer en casa y que te ayudarán a mejorar tu salud y tu circulación sanguínea.
LA IMPORTANCIA DE LA CIRCULACIÓN SANGUÍNEA
La circulación sanguínea es muy importante ya que se encarga de limpiar nuestro organismo de aquellas sustancias que no puede aprovechar y de llevar los nutrientes a todo el cuerpo. Por ello, hay que cuidarla para conseguir tener una buena salud.
Conseguir mejorar tu circulación sanguínea no es difícil, con dedicar 30 minutos a practicar algún tipo de actividad física es suficiente para que empieces a notar los beneficios.
Los ejercicios que mejorarán tu circulación sanguínea no son muy complicados de hacer. Con caminar 20 minutos al día a paso ligero favorecerás el flujo sanguíneo y el retorno venoso.
Pero si andar sin un rumbo no es lo tuyo, vamos a proponerte algunas rutinas para mejorar la circulación sanguínea.
LA IMPORTANCIA DEL CUIDADO DE LA CIRCULACIÓN EN LAS PIERNAS
Antes de contarte qué ejercicios puedes hacer para mejorar la circulación, es importante que sepas qué factores afectan a la circulación sanguínea y sobre todo a la circulación de las piernas.
Y es que la circulación de las piernas se puede ver afectada por diferentes factores, dañando así la calidad de vida de la persona que padece los síntomas.
Lo primero que debes saber es que los problemas circulatorios se pueden presentar a cualquier edad, no es necesario tener una edad avanzada para que aparezcan los primeros síntomas. Es cierto que el mayor número de casos con problemas circulatorios se suelen dar en personas de 40 años de edad o más. Pero también suelen aparecer en personas con edades más tempranas.
Por ello, es muy importante cuidar la alimentación y empezar a poner en práctica hábitos saludables. Sí, con esto nos estamos refiriendo a que deberás practicar deporte de forma regular si quieres acabar con esta patología y mejorar tu calidad de vida y tu salud.
Si estás decidid@ a cuidar tu circulación, deberás empezar a practicar algún tipo de actividad física durante al menos 30 minutos al día.
A continuación, te explicamos algunos ejercicios para que puedas empezar a practicar lo antes posible.
1. ELEVACIONES PARA ACTIVAR LA CIRCULACIÓN DE LAS PIERNAS
Los ejercicios donde haya elevaciones de piernas son perfectos para prevenir y para combatir los trastornos circulatorios. Al elevar las piernas se activa el flujo sanguíneo por lo que es ideal si quieres empezar a activar tu circulación sanguínea.
Además, son ejercicios fáciles de realizar. Únicamente deberás utilizar una esterilla para evitar lesiones en la espalda y mejorar tu comodidad.
Una vez tumbado en el suelo, deberás alzar las piernas hacia el techo, extiéndelas tanto como puedas. Una vez conseguido deberás flexionar las rodillas y volver a estirar hasta completar 20 repeticiones con movimientos alternos. De esta manera, estarás ayudando a que la circulación sanguínea llegue mejor a las piernas.
Si ves que los ejercicios de rodilla no acaban de encajar en tu rutina los puedes suprimir y hacer, únicamente, las elevaciones de las piernas. Pero si ves que puedes complementar los dos ejercicios mucho mejor, ya que te ayudará a obtener mejores resultados.
2. ESTIMULACIÓN DE BICICLETA
Ya que hemos comprado una esterilla, habrá que amortizarla ¿no?
Para hacer este ejercicio deberás colocar la esterilla en el suelo y tumbarte sobre ella. Una vez tumbado deberás elevar y mover las piernas al mismo tiempo. De esta manera, ayudamos al retorno de la sangre al corazón.
Son ejercicios fáciles de hacer, para llevarlos a cabo deberás asegurarte que la espalda quede totalmente recta, apoyada en el suelo, y colocar las manos detrás de la nuca.
Una vez que ya tengas esa posición, deberás elevar las piernas y simular un pedaleo durante uno o varios minutos.
Quizás al principio con un minuto es más que suficiente, ya que el esfuerzo es mucho mayor, pero conforme vayas practicando la resistencia aumentará y con ella el tiempo que le dedicarás a hacer este ejercicio.
Cuanto más tiempo le dediques, mejores resultados obtendrás.
Pero, aunque el ejercicio diario te ayudará a saber cómo mejorar la circulación de tus piernas y a mejorar tu salud, también deberás adoptar hábitos saludables para cuidar tu estado circulatorio.
Entre esos hábitos saludables está cuidar tu dieta y empezar a incorporar alimentos saludables que contribuyan a estimular la circulación.
Alimentos como los arándanos, el pescado azul, los frutos secos… Si quieres saber qué propiedades tienen estos alimentos no te puedes perder el post de la semana que viene.